Cirugía Plástica, estética y reconstructiva
La bichectomía, si bien es un procedimiento estético sencillo, no está exenta de riesgos y posibles complicaciones, al igual que cualquier intervención quirúrgica. Los pacientes deben siempre estar bien informados sobre los posibles riesgos antes de la intervención.
Uno de los riesgos asociados con la bichectomía es la posibilidad de infección, una complicación común en cualquier procedimiento quirúrgico. Aunque se toman medidas estrictas para minimizar este riesgo, es importante seguir al pie de la letra las indicaciones de cuidado postoperatorio indicadas por el cirujano para reducir al mínimo la posibilidad de infección.
Podría darse cierta asimetría facial si la extracción de las bolsas de Bichat no se realiza de manera uniforme. Esta es una complicación que podría requerir intervenciones adicionales para corregirla, por ello es importante elegir un cirujano con experiencia y habilidad en este tipo de procedimientos.
Otra complicación potencial es el daño a estructuras faciales adyacentes, como los nervios, que puede resultar en alteraciones de la sensibilidad en la zona intervenida. Aunque estos casos son raros, es crucial estar al tanto de esta posibilidad.
También es posible experimentar resultados insatisfactorios, ya sea por expectativas no realistas o por variaciones en la cicatrización y respuesta individual del cuerpo al procedimiento. En algunos casos, esto puede llevar a la necesidad de cirugías correctivas.
Finalmente, es esencial entender que la bichectomía, al ser una intervención definitiva, requiere una consideración cuidadosa. Los cambios estéticos son permanentes, y con el paso del tiempo, la pérdida natural de volumen facial debido al envejecimiento puede hacer que algunas personas deseen haber conservado esa grasa facial.
La decisión de someterse a una bichectomía debe tomarse tras una reflexión profunda y una discusión detallada con un cirujano estético cualificado, quien puede proporcionar una valoración honesta de los riesgos y beneficios basada en el perfil individual del paciente.