La cirugía postbariátrica engloba diferentes técnicas quirúrgicas. Son técnicas dirigidas básicamente a acabar con el exceso de piel colgante en diferentes zonas del cuerpo (brazos, piernas, abdomen, cara…) que se produce a consecuencia de una pérdida drástica de peso.
La cirugía bariátrica (bypass gástrico, manga gástrica, etc.) se realiza para mejorar la salud de las personas con sobrepeso crónico cuya salud se ve comprometida. Mejora la movilidad, disminuye el riesgo cardio-metabólico y/o ayuda en la remisión de la diabetes, entre otros factores. Sin embargo, debido a la pérdida brusca de peso, genera faldones cutáneos en diferentes zonas del cuerpo. Para conseguir resultados satisfactorios y disfrutar de un contorno más armonioso, la cirugía estética reparadora resulta muy útil.
Los candidatos a este tipo de cirugía estética son pacientes que han perdido más de 35 o 45 kg de peso y que se encuentran en buen estado de salud después de haberse sometido a la cirugía bariátrica. Su índice de masa corporal debe estar por debajo de 30, por lo que ya no se considerará como una persona con obesidad mórbida.
En general, podemos decir que el efecto de reducir la flacidez y los excesos cutáneos es inmediato. Tendrá que pasar un año tras la intervención para que la cicatrización se complete, para que tenga lugar una resolución completa de la inflamación y para que los tejidos se readapten de forma definitiva.
Estas son algunas de las secuelas de la cirugía bariátrica que se pueden solventar mediante las diferentes técnicas de cirugía reparadora que Institut Ruiz Castilla practica:
La atrofia mamaria
- Un adelgazamiento severo puede provocar la pérdida de un volumen importante en las mamas. Aunque no altere su posición, esto puede hacer que la forma anatómica del pecho ya no sea la correcta. Un aumento mamario ayudaría a ponerle solución.
La ptosis mamaria
- Es muy común que la cirugía bariátrica conlleve caídas importantes de la mama. Cuando el pezón cae por debajo del surco submamario hablamos de un problema de ptosis mamaria. Lo podemos corregir con la técnica de elevación de la mama, la cual puede requerir la colocación de prótesis.
La hipertrofia mamaria
- Si uno de los resultados del adelgazamiento severo del paciente es que su pecho se vea excesivamente voluminoso en relación al contorno corporal, se puede buscar un aspecto más proporcionado con técnicas quirúrgicas de reducción del volumen mamario. La mamoplastia de reducción puede realizarse eliminando grasa del pecho, grasa y piel, o incluso grasa, piel y glándula mamaria si fuera preciso.
La laxitud abdominal
- El exceso de piel residual se puede eliminar con la realización de una abdominoplastia o miniabdominoplastia, sobre todo en aquellos casos que presenten estrías periumbilicales (alrededor del ombligo) residuales.
La dehiscencia de rectos
- La dehiscencia de rectos, también llamada diástasis de rectos, se da cuando se ha producido una separación excesiva entre el lado derecho e izquierdo del músculo recto mayor del abdomen, que cubre la zona frontal del vientre. Esto es muy habitual en personas que han padecido obesidad mórbida. Se corrige mediante la plicatura de los mismos y suele realizarse en combinación con la abdominoplastia.
La laxitud facial
- La pérdida de peso tan elevada que provoca la cirugía bariátrica conlleva también que el contorno del rostro se vea afectado de manera llamativa. El lifting permite eliminar tejido colgante y retensar la piel de las zonas afectadas para armonizar toda la expresión facial.
La laxitud de brazos y muslos
- El lifting de brazos (braquioplastia) y de muslos (cruroplastia) puede ser necesario en pacientes con un exceso cutáneo redundante a consecuencia de la importante pérdida de volumen. Y es que los faldones cutáneos pueden afectar también al día a día de las personas por ser muy incómodos, provocar roces que irriten la piel, etc.